La búsqueda de una alimentación saludable es un objetivo que cada vez más personas persiguen, suena algo fácil de llevar a cabo, pero la información, el marketing, las redes sociales, etc, pueden confundirnos y contribuir a que nos equivoquemos. Con este post tenemos la intención de ayudarte a tomar las mejores decisiones de compra que ayuden con los propósitos en tu camino a una dieta saludable, enlistamos algunos de los productos que en la consulta hemos visto que los pacientes suelen tener más confusión.
La amplia variedad de yogur light que se ofertan en los supermercados nos ofrece una opción ligera por no tener grasa, “azúcar” y por lo tanto menos calorías.
La realidad es que la mayoría si contiene azúcar, edulcorantes y en algunos casos almidones para mejorar su consistencia.
Te sugerimos sustituirlo por: yogurt natural sin azúcar ya que la grasa de los lácteos te ayudará a controlar tu apetito, también es una buena fuente de probióticos y puedes agregarle alguna fruta de temporada madura para darle un poco de dulzor.
Generalmente estos productos son elaborados con edulcorantes como Stevia o splenda y se ofrecen para diabéticos o personas que quieren cuidar su dieta, sin embargo, la mayoría son elaborados a base de harinas refinadas y grasas de mala calidad que no son lo mejor si buscamos mejorar nuestra alimentación.
Te sugerimos sustituirlo por: un pan integral tostado con una cucharadita de mermelada sin azúcar o alguna fruta machacada.
En el caso de los embutidos te sugerimos revisar el contenido real de carne, ya que muchos contienen menos del 70% de carne y el resto son féculas, soya, almidones, azúcares, etc, lo cual resulta en un producto poco saludable.
Te sugerimos sustituirlo por: Pechuga natural de pollo o pavo a la pancha y horneada, cortada en láminas delgadas, puedes congelar algunas láminas y utilizarlas en tu sándwich cuando las necesites.
Se venden como una alternativa a un desayuno rápido, saludable y que promete cuidar tu figura. Sin embargo, la gran mayoría suelen tener entre el 15-20% de azúcar y sólo una pequeña parte son cereales integrales.
Te sugerimos sustituirlo por: hojuelas de avena, arroz integral o amaranto o cereales tostados sin azúcar.
La oferta de aderezos puede ser muy confusa, ya que al vincularse con ensaladas se piensa que lo saludable viene de la mano y la realidad es que la mayoría de los aderezos comerciales son muy altos en grasas de mala calidad, sódio y altos en calorías.
Te sugerimos: aderezar con limón, aceite de olivo, vinagre balsámico, un poco de sal. O en su caso, elaborar las vinagretas en casa en donde tu controlas las porciones y la calidad de los ingredientes utilizados.
Si tienes alguna duda, acude con tu nutrióloga y ella podrá resolverla y darte alternativas.