Los quesos son una excelente fuente de proteína y de grasa, el consumo de los quesos bajos en grasa como el queso panela, oaxaca, requesón, cotage se recomienda para las personas que tienen una buena tolerancia a la lactosa y buscan una fuente de proteína baja en grasa, al ser quesos frescos tienen mayor cantidad de suero y agua y menor cantidad de grasa.
Los quesos más grasosos tendrán menos lactosa y pueden ser mejor tolerados por aquellas personas intolerantes a la lactosa o incluso con padecimientos como colon irritable, tal es el caso del gruyere, el queso curado español, queso cheddar, camembert, ya que algunos se consideran quesos con 0% lactosa.
Los quesos elaborados con leche de cabra suelen ser mejor tolerados en general.
Los quesos frescos que tienen fermentos lácticos se consideran de fácil digestión.