A lo largo de la historia los seres humanos se han sentido atraídos a investigar qué son los sueños.
Existen registros tempranos en las culturas griega y egipcia que dan cuenta del interés que éstos han provocado a lo largo del tiempo.También es posible encontrar algunos pasajes en la Biblia que mencionan descifrar los sueños.
En diversas culturas se les ha atribuido un poder profético, como una suerte de mensaje cifrado que debe ser descubierto. Se pueden encontrar tendencias a generalizar los significados de los elementos que aparecen en los sueños, y en otro tipo de acercamientos que atribuyen significados singulares a los elementos de éstos, es decir, que solo tienen sentido para aquella persona que los sueña.
Podemos describir a grandes rasgos que los sueños son aquellas manifestaciones mentales que ocurren mientras un individuo duerme. Estas pueden ser imágenes, sonidos o pensamientos que de alguna manera mantienen una relación con quien los sueña.
Soñar es un proceso involuntario y lo que las personas pueden recordar de sus sueños varia mucho, yendo desde elementos muy simples como imágenes, sonidos o ideas, hasta otros muy elaborados, que contienen escenas, personajes y objetos, dentro de alguna narrativa.
Es posible producir sueños en todas las fases del sueño (dormir) pero de acuerdo a las investigaciones se recuerdan más aquellos que aparecen durante la fase MOR (movimientos oculares rápidos) que corresponde a la última del ciclo del sueño.
Hasta el día de hoy no existe un consenso respecto a cuál es la función de soñar. Sin embargo, desde muchas disciplinas se han generado diversas explicaciones. Muchas de ellas buscan responder ¿qué quieren decir? ¿Los sueños dicen algo de quién los sueña?
Estas preguntas han prevalecido porque se infiere que en los sueños se expresan, tramitan, revelan o elaboran aspectos de la vida emocional de las personas.
Una de las primeras disciplinas en tomar en serio el estudio de los sueños y darle un valor importante en el tratamiento de la vida emocional fue el psicoanálisis.
Después de Freud, en el psicoanálisis, otros autores como Jung, trabajaron a fondo los sueños, pero con un objetivo diferente: encontrar ciertas generalidades en los sueños para poderlos clasificar y ofrecer un significado, línea que han tomado varias disciplinas para acercarse al estudio de los sueños.
De acuerdo a cada disciplina, el objetivo de la utilización de los sueños en el trabajo terapéutico cambia. En la terapia cognitivo-conductual está más ligada a la resolución de problemas, y en el psicoanálisis a la de avanzar en el conocimiento profundo de la personalidad, a través de la interpretación de los elementos manifiestos y latentes.
En cualquier caso el valor de los sueños en la comprensión emocional de las personas es muy alto, es un campo abierto para entrar en contacto con representaciones simbólicas de nuestros miedos, deseos, conflictos y emociones. Sin embargo, el trabajo fructífero con ellos depende de qué tanto el terapeuta como el paciente le den un valor a estos dentro de la psicoterapia.
Bibliografía:
La teoría de los sueños. Parte I: una revisión bibliográfica ( 2002) Revista Internacional de Psicoanálisis. Número 12. Fecha de consulta: febrero 2020 Aperturas http://www.aperturas.org/articulo.php?articulo=0000217